jueves, 14 de noviembre de 2013
A solas Con Dios Instrumental claudio freidzon
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Espíritu Santo te necesito
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viernes, 14 de junio de 2013
LOS HIJOS HONRAN A SUS PADRES ¿Y PARA QUE?
LOS HIJOS HONRANDO A LOS PADRES
Cada uno temerá a su madre y a su padre, y mis días de reposo guardaréis. Este temor no es más que el respeto que los hijos deben de dar a sus padres y con más razón honrarlos en obediencia a la palabra de Dios. Honrar a tus padres, trae consigo una promesa de bendición, tus días serán alargados en la tierra y todo te saldrá bien, como lo diceDeuteronomio 5:16: Honra a tu padre y a tu madre, como Jehová tu Dios te ha mandado, para que sean prolongados tus días, y para que te vaya bien sobre la tierra que Jehová tu Dios te da.
¿Para ti qué es honrar a los padres?, ¿Es ignorarlos o contestar mal cuando nos dan un consejo? ¿Es olvidarlos y ni siquiera hacerles una llamada? ¿Es mortificarlos por nuestros líos? ¿Es ser desobedientes cuando nos encargan algo? ¿Es avergonzarte de ellos delante de tus amigos o tus amistades?, Claro que no, la palabra de Dios nos muestra un principio que debemos seguir como hijos: Que seamos piadosos con nuestra familia y recompensemos a nuestros padres; porque esto es lo bueno y agradable delante de Dios (1a de Timoteo 5:4); Nuestros padres nos han brindado muchas cosas incondicionalmente, y si aún no me dieren, por obediencia a Dios debo de honrarlos. ¿Qué debo hacer para recompensar a mis padres? visítelos (conviva con ellos, no visita de doctor), atiéndalos más aún si están enfermos (hágalo con amor, no como una carga), ayúdelos económicamente o con una despensa (déselos de corazón, no de lo que le sobre), llámeles por teléfono (dese cuenta como están) y si vive cerca de ellos invítelos a comer, a su casa o algún restaurant (dese tiempo). Tal vez algunos hijos dirán, mis padres no merecen mi ayuda ni mi compasión porque en los momentos que más los necesité me abandonaron y cuando me disciplinaron no fue la forma más correcta y me hicieron mucho daño. Pero tú, ya no cargues más con ese dolor o rencor que existe en tu corazón, ven a Jesús, Él quiere sanar tus heridas, Él te recibe con sus brazos abiertos y quiere perdonarte no importando cuál sea tu condición, Él te recibe con amor y misericordia. El Señor te da ese amor que necesitas para perdonar a tus padres; hónralos y veras la promesa de Dios cumplida en ti.
No debemos pasar por alto honrar a nuestros ancianos, como son los abuelos, e incluyo a padres y suegros que por su edad lo son. Hay que tener respeto a sus canas y honrarlos con nuestro cuidado y amor, con nuestra ayuda y atención y con nuestro apoyo financiero, ya que la mayoría de ellos no se pueden valer por sí mismos, hacedlo todo por obediencia y amor a Dios, como nos dice en Levítico 19:32 Delante de las canas te levantarás, y honrarás el rostro del anciano, y de tu Dios tendrás temor. Yo Jehová. Enseñemos estos principios a nuestros hijos y que ellos aprendan a obedecer a Dios, honrando a sus padres, así como respetando a sus abuelos paternos y abuelos maternos.
Como siempre nos ha dicho mi madre, “Cuando quieran ayudar a sus padres, háganlo en vida, no cuando ya no los tengan”. Si aún tienes a tus padres con vida, ¡hónralos hoy!, que ellos se sientan halagados y bendecidos por ti.
Saludos cordiales, bendiciones
lunes, 10 de junio de 2013
¿SOBRE QUIEN ESTAN LAS HUELLAS?
Romanos 2: 1 “ Por lo cual eres inexcusable, oh hombre, quien quiera que seas tú que juzgas; pues en lo que juzgas a otro, te condenas a ti mismo, porque tú que juzgas haces lo mismo”
Santiago no podía creer lo que estaba viendo ¡Juan, había recibido la bandera y tenía el guardapolvo salpicado de barro! Santiago ocultó la risa debajo de su campera y buscó la mirada cómplice de otro compañero con quien pudiera burlarse de Juan. Parecía que nadie se había percatado de las manchas que chorreaban por el blanco delantal. Con picardía, pensó en todas las bromas que tendría que soportar Juan a causa de aquellas manchas.
Parece mentira que Juan se hubiese presentado así, en un día tan especial, ya que siempre era un chico impecable, tan distinto a él que andaba bastante desaliñado. Pero a partir de hoy, se dijo con cierta satisfacción mirando sus sucias zapatillas y su estropeado vaqueronuevo, ya nadie tendrá derecho a corregirme tomando como ejemplo a Juan: El está absolutamente descalificado con esas horribles manchas.
Santiago dejó de evaluar su aspecto y al volver su mirada a Juan quedó todavía más horrorizado porque descubrió que en la frente y cerca de las orejas, chorreaban delgadas gotas marrones ¡Esto sí que es vergonzoso! Susurró y ocultó una carcajada que sólo percibieron los que estaban cerca, quienes lo miraron extrañados, pensando qué era lo que le causaba tanta gracia. El chico que estaba adelante se dio vuelta para saber lo que estaba pasando y lanzó una risotada que hizo que otros compañeros miraran a Santiago y también se rieran. En ese momento una voz desde el frente pidió silencio y todo volvió a la normalidad.
¡Los chicos ya se dieron cuenta! Pensó contento Santiago, Juan será el hazmerreír de todo elcolegio. Desde lejos, Marisol se había dado vuelta y lo miraba con una gran sonrisa. Si ella nunca se había fijado en él ¿por qué lo estaba haciendo ahora? Sin duda Marisol también se reía de Juan. Por fin finalizó el acto. Santiago suspiró feliz, no veía el momento de reunirse con sus amigos para divertirse a costa de las manchas de Juan.
El grupo se dividió en dos, dejando un espacio en el medio para que pasen los que llevaban la bandera. Las autoridades del colego iban detrás. Santiago no apartó su mirada de Juan en todo este tiempo y ahora que lo veía de cerca ¡Qué grandes se veían las manchas! ¡Qué ridículo se vía Juan en ese estado! Lo extraño fue que al pasar, los maestros le sonreían de forma afectuosa. Cuando su señorita pasó a su lado, se inclinó de manera delicada hacia él y le susurró al oído:
–Santiago, Límpiate los anteojos porque están manchados con barro.
Rojo de vergüenza, Santiago se quitó los anteojos, no podía creer lo que estaba viendo: las manchas estaban sobre el cristal de sus anteojos. Y Juan, impecable como siempre, escoltaba la bandera a la vez que todos lo despedían con un fervoroso aplauso.
Por eso no es bueno criticar a otros. Antes debemos evaluar si no somos nosotros los que estamos en problemas.
Textos Bíblicos
Mateo 7:1-5
1- “No juzguéis para que no seáis juzgados.
2- Porque con el juicio con que juzguéis, series juzgados, y con la medida
Con que medías, os será medido.
3 – ¿Y por qué miras la paja en el ojo de tu hermano, y no echas de ver
La viga que está en tu propio ojo?
4 – ¡O qué diréis a tu hermano: déjame sacar la paja de tu ojo,
Y he aquí la viga en el ojo tuyo?
5 – ¡Hipócritas! Saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces, verás bine
Para sacar la paja del ojo de tu hermano.”
1- “No juzguéis para que no seáis juzgados.
2- Porque con el juicio con que juzguéis, series juzgados, y con la medida
Con que medías, os será medido.
3 – ¿Y por qué miras la paja en el ojo de tu hermano, y no echas de ver
La viga que está en tu propio ojo?
4 – ¡O qué diréis a tu hermano: déjame sacar la paja de tu ojo,
Y he aquí la viga en el ojo tuyo?
5 – ¡Hipócritas! Saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces, verás bine
Para sacar la paja del ojo de tu hermano.”
EL TESORO DEL ANCIANO
El tesoro del anciano
Mateo 13: 44 “Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo…”
Cuenta la leyenda que unos ladrones entraron en la sencilla vivienda de un anciano comerciante en Venecia. Ellos se habían enterado que él poseía un tesoro muy valioso.
Seguramente alguien lo había delatado, ya que el hombre, de manera inocente, había manifestado públicamente la inmensa felicidad que tenía después de recibir el tesoro.
Cuando estos sinvergüenzas entraron, el anciano estaba sentado y leía en paz, un libro grueso de tapas negras.
Cuando él los vio, no se hizo demasiado problema, al fin de cuentas tenían muy poco que robarle. Los miró con tristeza y los invitó a sentarse junto a él para seguir la lectura.
– Queremos tu tesoro – le gritaron con insolencia – ¿Dónde lo tienes escondido?
El anciano no se inmutó demasiado a pesar de lo temibles que parecían. Y les señaló con el dedo hacia arriba.
– ¡Arriba! – Gritaron ellos – Corramos a la planta alta
Mientras ellos hacían todo tipo de destrozos, ruidos y griterío, al buscar el tesoro del anciano, él seguía sereno la lectura.
– Hemos buscado el tesoro y no está en la planta alta – le gritaron impacientes – ¡Dinos por última vez dónde lo tienes escondido!
El anciano los miró con pena y volvió a señalar hacia arriba con el dedo.
– ¡En la terraza! –Vociferaron, al pensar que todavía quedaba un sitio más donde buscar – ¡Corramos a la terraza!
Pero la azotea estaba vacía. No había ningún rastro de tesoro por allí. Los dos descendieron furiosos y agarrando al anciano de la chaqueta, lo obligaron a subir con ellos.
– Dimos ahora ¿Dónde está el tesoro? – lo increparon con furia.
El anciano que siguió conservando la calma, alzó la vista hacia el cielo y les dijo.
– Allá arriba ¿Cómo es que no lo vieron? – les preguntó con inocencia.
Los delincuentes desencajados de ira, alzaron también la vista buscando desesperados el tesoro. Pero tambalearon y se cayeron al precipicio. Con la ventaja de que cayeron sobre las aguas de un canal. Y heridos, mojados y avergonzados huyeron despavoridos. Pero poco les duró la libertad porque tan sólo a unos metros los esperaba la policía para meterlos en la cárcel.
– Allá arriba, – Repetía el anciano señalando el cielo, ajeno a lo que había ocurrido con los malhechores – Miren, allá está mi tesoro.
Mateo 6:19-21
No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompe, y donde ladronas minan y hurtan; Mas haceos tesoros en el cielo, donde ni polilla ni orín corrompe, y donde ladrones no minan ni hurtan: Porque donde estuviere vuestro tesoro, allí estará vuestro corazón.
UN HOMBRE RICO
Un hombre rico
Lucas 12:15
“Y díjoles: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee”
Había un hombre que se decía muy rico. La gente de la ciudad le abría paso cuando él llegaba y corrían a atenderlo en las puertas cuando él entraba. Todos lo miraban con admiración y muchos soñaban con poseer su fortuna. Cuando había alguien que tenía alguna necesidad, de medicinas, alimentos o ropa con que cubrirse, el tal señor pagaba y decía que lo pongan a su cuenta. Por eso las personas lo apreciaban sinceramente. Compraba libros, golosinas y juguetes para los niños. Visitaba los asilos, los orfanatos y los hospitales. La gente necesitadasiempre recurría a él y nadie se volvía con las manos vacías.
Pero lo que más sorprendía de su historia era que trabajaba humildemente y sin descanso, para un millonario, avaro, ambicioso y egoísta. Pero eso no tenía demasiada importancia porque él siempre decía que era un hombre rico.
Después de unos cuantos años, este buen señor se enfermó y ya no pudo trabajar más. Aún así, él siempre atendió a quienes les pedían ayuda y seguía cargando a su cuenta los gastos de los necesitados. Por el pueblo corrió el rumor que el millonario para quien él trabajaba, no tuvo misericordia y lo abandonó a su suerte. Igual el hombre bueno, lo recordaba con afecto y oraba por él como lo hacía por las demás personas.
Un día golpeó a su puerta el empleado de un banco. Resulta que su cuenta estaba en problemas, ya no tenía fondos para responder por los otros como lo venía haciendo. El buen señor, lo miró con tristeza y pensó: “¿Qué será de toda la gente que venía por ayuda?”. Así que sin perder tiempo, buscó en uno de los cajones y sacó una llave.
— Tome a cuenta esta propiedad –le dijo con firmeza entregándole la llave de su casa – Pero por favor siga pagando mis cuentas.
Al empleado se le llenaron los ojos de lágrimas.
– Pero señor – le dijo con pesar – ¿No es acaso usted un hombre muy rico? ¿Por qué empeñar su vivienda a riesgo de quedarse en la calle?
– Tiene usted razón, Soy un hombre muy rico – le contestó el buen hombre con una paz especial en la mirada.
– ¿Entonces no tiene usted otro bien para hacer frente a la situación, que no sea esta propiedad?
– Mire joven, esta propiedad no forma parte de mi tesoro, es sólo algo que con el tiempo desaparecerá. Mi riqueza, la que nadie me podrá quitar, consiste en el amor de la gente, la sonrisa de los niños, la medicina de los pobres, el pan de los ancianos. Mi riqueza no es esta propiedad y las monedas que aún me quedan en el banco. Soy rico porque Dios siempre me sostuvo, porque me ha salvado, me ha dado fuerza y sabiduría para el bien y para ganarme el afecto de la gente. Por eso soy un hombre rico.
Al empleado se le llenaron los ojos de lágrimas.
– Pero señor – le dijo con pesar – ¿No es acaso usted un hombre muy rico? ¿Por qué empeñar su vivienda a riesgo de quedarse en la calle?
– Tiene usted razón, Soy un hombre muy rico – le contestó el buen hombre con una paz especial en la mirada.
– ¿Entonces no tiene usted otro bien para hacer frente a la situación, que no sea esta propiedad?
– Mire joven, esta propiedad no forma parte de mi tesoro, es sólo algo que con el tiempo desaparecerá. Mi riqueza, la que nadie me podrá quitar, consiste en el amor de la gente, la sonrisa de los niños, la medicina de los pobres, el pan de los ancianos. Mi riqueza no es esta propiedad y las monedas que aún me quedan en el banco. Soy rico porque Dios siempre me sostuvo, porque me ha salvado, me ha dado fuerza y sabiduría para el bien y para ganarme el afecto de la gente. Por eso soy un hombre rico.
El empleado lo escuchaba conmovido. Estaba recibiendo la lección más importante de su vida.
– Rico es el que tiene todo tipo de riquezas y no sólo dinero. El que sólo tiene dinero, puede que sea una persona muy pobre. Pero esto querido –le dijo el hombre con voz pausada – es una sabiduría que el mundo no quiere comprender.
Con el tiempo al buen señor le cerraron la cuenta bancaria porque ya no tenía dinero. A pesar de todo, seguía siendo un hombre rico porque vinieron en su ayuda muchas de las personas a las que él les había tendido una mano. Nunca estuvo solo, nunca le faltó nada.“Dios es fiel” repetía el buen hombre con una sonrisa de paz en los labios, hasta el día en que finalmente descansó en los brazos del Señor.
Textos Bíblicos
Lucas 12:19-21 Conclusión de la Parábola del rico insensato “Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios”
Lucas 12: 34. “Porque donde está v
Lucas 12:19-21 Conclusión de la Parábola del rico insensato “Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios”
Lucas 12: 34. “Porque donde está v
jueves, 2 de mayo de 2013
lunes, 25 de marzo de 2013
domingo, 17 de marzo de 2013
¿COMO CONSTRUYES TU VIDA?
La Casa del Carpintero
“Hoy tienes la oportunidad entre elegir una buena actitud que te abrirá puertas o una mala actitud que te cerrará las puertas. Tú eliges.”
Un viejo carpintero llegaba a la edad para jubilarse. Contó sus planes a su jefe de que quería dejar la construcción y vivir una vida más relajada con su mujer y disfrutar de su familia.
Echaría de menos su salario pero necesitaba jubilarse. La familia sobreviviría. El contratista lamentaba ver irse a su buen trabajador y le pregunto si podría construir una última casa como favor personal. El carpintero asintió, pero poco a poco era fácil ver que su corazón no estaba en su trabajo. Trabajaba mal y usaba materiales de calidad inferior. Desafortunada manera de acabar su carrera.
Cuando el carpintero acabó su trabajo vino el contratista para inspeccionar la casa. El contratista dio la llave de la puerta principal al carpintero y dijo; -Ésta es tu casa, mi regalo para ti.
¡Qué susto! ¡Qué pena! ¡Ojalá hubiera sabido que construía su propia casa, lo hubiera hecho muy diferente! Ahora tenía que vivir en el hogar que no había construido bien.
sí es en nosotros. Construimos nuestras vidas distraídamente. Reaccionamos en lugar de actuar, estamos contentos con aguantar menos que lo mejor. En momentos críticos no damos al trabajo nuestro mejor esfuerzo. Así que con un susto miramos la situación que hemos creado y encontramos que vivimos en la casa que hemos construido. Si nos hubiéramos dado cuenta lo hubiéramos hecho diferente.
Imagínate que fueras un carpintero. Piensa en tu casa. Cada día clavas un clavo, pones una estantería o levantas una pared. Construye con sabiduría. Es la única vida que vas a construir. Aunque solo vivas un día más, aquel día merece ser vivido con gracia y dignidad. La placa en la pared dice, ´La vida es un proyecto de bricolaje: hazlo tú mismo.’ Recuerda: Tu vida mañana será el resultado de tu actitud y decisiones que haces hoy.
“Hoy tienes la oportunidad entre elegir una buena actitud que te abrirá puertas o una mala actitud que te cerrará las puertas. Tú eliges.”
Un viejo carpintero llegaba a la edad para jubilarse. Contó sus planes a su jefe de que quería dejar la construcción y vivir una vida más relajada con su mujer y disfrutar de su familia.
Echaría de menos su salario pero necesitaba jubilarse. La familia sobreviviría. El contratista lamentaba ver irse a su buen trabajador y le pregunto si podría construir una última casa como favor personal. El carpintero asintió, pero poco a poco era fácil ver que su corazón no estaba en su trabajo. Trabajaba mal y usaba materiales de calidad inferior. Desafortunada manera de acabar su carrera.
Cuando el carpintero acabó su trabajo vino el contratista para inspeccionar la casa. El contratista dio la llave de la puerta principal al carpintero y dijo; -Ésta es tu casa, mi regalo para ti.
¡Qué susto! ¡Qué pena! ¡Ojalá hubiera sabido que construía su propia casa, lo hubiera hecho muy diferente! Ahora tenía que vivir en el hogar que no había construido bien.
sí es en nosotros. Construimos nuestras vidas distraídamente. Reaccionamos en lugar de actuar, estamos contentos con aguantar menos que lo mejor. En momentos críticos no damos al trabajo nuestro mejor esfuerzo. Así que con un susto miramos la situación que hemos creado y encontramos que vivimos en la casa que hemos construido. Si nos hubiéramos dado cuenta lo hubiéramos hecho diferente.
Imagínate que fueras un carpintero. Piensa en tu casa. Cada día clavas un clavo, pones una estantería o levantas una pared. Construye con sabiduría. Es la única vida que vas a construir. Aunque solo vivas un día más, aquel día merece ser vivido con gracia y dignidad. La placa en la pared dice, ´La vida es un proyecto de bricolaje: hazlo tú mismo.’ Recuerda: Tu vida mañana será el resultado de tu actitud y decisiones que haces hoy.
¿COMO ESTAS MIRANDO LA VIDA HOY? ( PARA REFLEXIONAR)
Se cuenta la historia de gemelos idénticos: uno lleno de optimismo que a menudo solía decir: ¡Todo está saliendo color de rosas! y el otro, un pesimista triste y sin esperanza que de continuo esperaba que sucediera lo peor.
Los padres preocupados por los gemelos los trajeron a un psicólogo, con la esperanza de que él pudiera ayudarlos a balancear sus personalidades.
El psicólogo sugirió que en el próximo cumpleaños de los gemelos, los padres los pusieran en habitaciones separadas para abrir sus regalos.
Denle al pesimista los mejores regalos que puedan comprar -les dijo el psicólogo- , y al optimista una caja de estiércol.
Los padres hicieron como se les dijo.
Cuando miraron a hurtadillas al gemelo pesimista, lo escucharon quejarse:
-No me gusta el color de este juguete. ¡Apuesto a que este juego se va a romper! No me gusta jugar a este juego. ¡Conozco a alguien que tiene uno mejor que este!
Atravesando de puntilla el pasillo, los padres miraron a hurtadillas y vieron a su hijo optimista, que con alegría tiraba al aire el estiércol. Se estaba riendo mientras decía:
- ¡No puedes engañarme! ¡Donde hay tanto estiércol, tiene que haber un caballo!
¿Cómo estas mirando la vida hoy? ¿Cómo un accidente que está esperando por suceder, o una bendición a punto de ser recibida?
La gente más feliz no necesariamente tiene lo mejor de todo. Ellos hacen lo mejor de las cosas.
No que hable porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme cualquiera que sea mi situación. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.
Filipenses 4:11,13
Los padres preocupados por los gemelos los trajeron a un psicólogo, con la esperanza de que él pudiera ayudarlos a balancear sus personalidades.
El psicólogo sugirió que en el próximo cumpleaños de los gemelos, los padres los pusieran en habitaciones separadas para abrir sus regalos.
Denle al pesimista los mejores regalos que puedan comprar -les dijo el psicólogo- , y al optimista una caja de estiércol.
Los padres hicieron como se les dijo.
Cuando miraron a hurtadillas al gemelo pesimista, lo escucharon quejarse:
-No me gusta el color de este juguete. ¡Apuesto a que este juego se va a romper! No me gusta jugar a este juego. ¡Conozco a alguien que tiene uno mejor que este!
Atravesando de puntilla el pasillo, los padres miraron a hurtadillas y vieron a su hijo optimista, que con alegría tiraba al aire el estiércol. Se estaba riendo mientras decía:
- ¡No puedes engañarme! ¡Donde hay tanto estiércol, tiene que haber un caballo!
¿Cómo estas mirando la vida hoy? ¿Cómo un accidente que está esperando por suceder, o una bendición a punto de ser recibida?
La gente más feliz no necesariamente tiene lo mejor de todo. Ellos hacen lo mejor de las cosas.
No que hable porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme cualquiera que sea mi situación. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.
Filipenses 4:11,13
sábado, 9 de marzo de 2013
TOMANDO DECISIONES SABIAS EN LA JUVENTUD
¿Camisa o polo? ¿Bus o colectivo? ¿Estudio o trabajo? ¿Soltería o casamiento? ¿Embarazo o aborto?... Decisiones, son muchas las decisiones que debemos tomar a diario, no es algo que nos proponemos o que podamos evitar, simplemente hay que hacerlas, pequeñas decisiones por asuntos muy simples o grandes e importantes decisiones con repercusiones de por vida.
Me cuesta creer la respuesta de algunas personas al ser entrevistadas respecto a "si hay algo de sus vidas que les gustaría cambiar o algo de lo que se arrepienten" y contestan con toda certeza: - "No, no cambiaría nada, no me arrepiento de nada".
Debo admitir que yo no podría dar esa respuesta. Cuando miro mi vida hacia atrás y recuerdo oportunidades preciosas que desaproveché ya sea por desidia, temor o flojera, o amistades o relaciones que me dañaron y que debería haber cortado, actitudes, frases, cosas que hice o dejé de hacer, etc., es imposible dejar de reconocer que hoy lo haría diferente, cambiaría muchas cosas, tomaría otras decisiones.
Hay épocas de nuestra vida, como la adolescencia, en las que pensamos que el mundo está a nuestros pies, nos creemos unos "sábelo-todo" y tomamos decisiones apresuradas sin tener conciencia, ni darles la importancia de lo que ellas nos traerán en el futuro.
Como adultos, comprobamos en carne propia que en ocasiones ni siquiera todos nuestros conocimientos y experiencia acumulada, son suficientes como para tomar las mejores decisiones.
Prov. 2:1-5 dice: "Hijo mío, presta atención a lo que digo y atesora mis mandatos. Afina tus oídos a la sabiduría y concéntrate en el entendimiento. Clama por inteligencia y pide entendimiento... Entonces comprenderás lo que significa temer al Señor y obtendrás conocimiento de Dios".
¿Quién si no Dios, que todo lo sabe, que nos creó con un propósito y nos conoce a la perfección, puede darnos el mejor de los consejos para llegar a la meta que nos tiene preparada? "¿Habrá alguien que pueda conocer los pensamientos del Señor? o ¿Existe alguien que sepa lo suficiente como para aconsejarlo?" (Rom.11:34) ¡No, no lo hay!
No podemos seguir ignorando a Dios, tomando decisiones basados solo en las cosas que nos gustany dan placer, o en las que nos hacen sentir bien, sin pensar en las consecuencias que esto nos puede traer. No se trata de "echar suertes" para decidir si nos conviene o no, es nuestro futuro, nuestra vida la que está en juego. Necesitamos algo más sólido, que resista el paso del tiempo y que sus efectos sean beneficiosos.
Necesitamos algo más poderoso, necesitamos Su sabiduría. ¿No la tenemos?
"Entonces, pidámosla a nuestro generoso Dios, y él nos la dará y no los reprenderá por pedírsela" Stgo.1:5
Sólo Dios puede dirigir nuestros pasos y darnos la fuerza para decidir, no sólo por lo que nos traerá placer momentáneo, sino bendición a lo largo de nuestra vida y a la de quienes nos rodean. Aunque no sea fácil y para hacerlo tengamos que pasar por un proceso doloroso, ¡vale la pena obedecer a Dios!
Señor: Ayúdanos a tomar decisiones que "afecten" y no que "infecten"nuestra vida.
LO QUE UN JOVEN CRISTIANO DEBE SABER
1- Honrar a tus padres: Éxodo 20:12 ( Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da.)
•Respétale.
•Obedezca.
•Hasle quedar bien, etc.
2- Respetar a tu prójimo: Significa llamarlas como son (por sus nombres), sin usar un vocabulario con jergas o groserías.
•El joven cristiano responsable debe actuar con seriedad y así descubrir el verdadero amor, el respeto significa también considerar los sentimientos de ambas personas.
3- Ser responsable: La vida es como un huerto, cosecharemos lo que sembramos, si nos respetamos y valoramos como varones y mujeres, nos responsabilizaremos aun de nuestra sexualidad.
•La libertad sexual no puede huir de sus consecuencias, los solteros están llamados a la ABSTINENCIA. 1ra Tes. 5:22 (Absteneos de toda especie de mal.) y los casados a la FIDELIDAD. 1ra Tim. 3:11-12 (Las mujeres asimismo sean honestas, no calumniadoras, sino sobrias, fieles en todo. Los diáconos sean maridos de una sola mujer, y que gobiernen bien sus hijos y sus casas.).
4- Temeroso para pecar: Es la persona que tiene miedo a alguien, espanto de algo, que hace correr, eso debe ser con todos nosotros y la juventud.
•Como José ante la tentación de la mujer de Pótifar, corrió y se escapó, fue temeroso de Dios y su patrón.
•Daniel y sus amigos también tenían temor a Dios, por eso ellos no querían contaminarse con la comida ni la bebida del rey. Dn. 1:8 (Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse.)
5- Auto disciplana: La biblia nos enseña que nuestro cuerpo es el templo del Espíritu Santo. Entonces como jóvenes cristianos debemos conservarnos puros 1ra Tes. 5:22 (5:22 Absteneos de toda especie de mal.), uno debe saber a donde va, a que hora sale, por donde va, etc.
•No tomes decisiones cuando estés enojado o molesto.
6- Huye de la pornografía, es pecado: La pornografía despierta la curiosidad indecente del depravado, incitando deliberadamente a la imaginación.
•Los productores de pornografía que el ser humano es débil y muy vulnerable, por eso dice la palabra de Dios, porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él. Prov. 23:7.
•Si alimentamos nuestra mente con pornografía daremos lugar a pensamientos sucios
•Respétale.
•Obedezca.
•Hasle quedar bien, etc.
2- Respetar a tu prójimo: Significa llamarlas como son (por sus nombres), sin usar un vocabulario con jergas o groserías.
•El joven cristiano responsable debe actuar con seriedad y así descubrir el verdadero amor, el respeto significa también considerar los sentimientos de ambas personas.
3- Ser responsable: La vida es como un huerto, cosecharemos lo que sembramos, si nos respetamos y valoramos como varones y mujeres, nos responsabilizaremos aun de nuestra sexualidad.
•La libertad sexual no puede huir de sus consecuencias, los solteros están llamados a la ABSTINENCIA. 1ra Tes. 5:22 (Absteneos de toda especie de mal.) y los casados a la FIDELIDAD. 1ra Tim. 3:11-12 (Las mujeres asimismo sean honestas, no calumniadoras, sino sobrias, fieles en todo. Los diáconos sean maridos de una sola mujer, y que gobiernen bien sus hijos y sus casas.).
4- Temeroso para pecar: Es la persona que tiene miedo a alguien, espanto de algo, que hace correr, eso debe ser con todos nosotros y la juventud.
•Como José ante la tentación de la mujer de Pótifar, corrió y se escapó, fue temeroso de Dios y su patrón.
•Daniel y sus amigos también tenían temor a Dios, por eso ellos no querían contaminarse con la comida ni la bebida del rey. Dn. 1:8 (Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse.)
5- Auto disciplana: La biblia nos enseña que nuestro cuerpo es el templo del Espíritu Santo. Entonces como jóvenes cristianos debemos conservarnos puros 1ra Tes. 5:22 (5:22 Absteneos de toda especie de mal.), uno debe saber a donde va, a que hora sale, por donde va, etc.
•No tomes decisiones cuando estés enojado o molesto.
6- Huye de la pornografía, es pecado: La pornografía despierta la curiosidad indecente del depravado, incitando deliberadamente a la imaginación.
•Los productores de pornografía que el ser humano es débil y muy vulnerable, por eso dice la palabra de Dios, porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él. Prov. 23:7.
•Si alimentamos nuestra mente con pornografía daremos lugar a pensamientos sucios
10 CONSEJOS PARA UN ADOLESCENTE
1. La vida no es justa. Acostúmbrate. El adolescente normal pasa el día diciendo y quejándose: "No es justo".
2. El mundo no se preocupará tanto por tu autoestima como lo hace tu escuela.
3. Lo lamento. No ganarás medio millón de dólares al año tan pronto salgas de la escuela, y no serás vicepresidente de la compañía, puede que hasta tengas que usar un uniforme de obrero.
4. Si piensas que tus maestros son duros, espera a tener un jefe.
5. Cocinar, preparar hamburguesas por ejemplo, no está por debajo de tu dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para preparar hamburguesas. Lo llamaban "Oportunidad".
6. No es culpa de tus padres si te equivocas. Tú eres responsable. Recuerda que dijiste: "Es mi vida" y "Tú no me mandas".
7. Antes de que nacieras tus padres no eran aburridos. Se volvieron más serios al solventar sus responsabilidades, como por ejemplo pagar recibos y al escucharte a ti.
8. La vida no está dividida en semestres. Y no tendrás vacaciones en el verano. Ni siquiera un descanso en la primavera. En el trabajo, esperarán que te presentes ocho horas cada día… Durante años.
9. El fumar no hace que te veas súper. Mira a un niño de 11 años con un cigarrillo en la boca. Así te ves tú para cualquier persona mayor de 20 años. Nunca fumes.
10. Tu escuela puede estar "basada en resultados visibles", pero la vida no lo está. En algunas escuelas te dan tantas oportunidades como necesites para poner la respuesta y para presentar exámenes. Los estándares están fijados bastante bajos para que casi todos puedan cumplirlos. Esto, por supuesto no se parece para nada a la verdadera vida, como pronto lo descubrirás.
Alégrate, joven, en tu juventud, y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia; y anda en los caminos de tu corazón y en la vista de tus ojos; pero sabe, que sobre todas estas cosas te juzgará Dios.
Quita, pues, de tu corazón el enojo, y aparta de tu carne el mal; porque la adolescencia y la juventud son vanidad. (Eclesiastés 11:9-10)
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